PARA: BERE Y ROBERTO
En 1975 conocí a su madre, la hermana mayor de la que entonces era mi novia y hoy es mi esposa, ya han pasado más de cuarenta años.
Fue una eminente Química, egresada del Instituto Politécnico Nacional, según me platicaba en nuestras largas charlas de sobremesa, mientras fumaba y se tomaba un exquisito café, brigadista en el Movimiento Estudiantil de 1968.
Nuestras pláticas siempre fueron interesantes hablábamos de diferentes temas y no siempre estábamos de acuerdo, pero así eran nuestras pláticas.
Cuando la conocí ya habías nacido Bere y pronto te hiciste una gran amiga, me decías tío Mayo,luego naciste tu Roberto, los dos pasaban largas temporadas con nosotros en Guadalajara, pero un día junto con sus papas marcharon a Tijuana,donde aun radican.
El día que se fueron les hicimos una despedida en el campo y los dejo el avión.
Su madre pronto destaco por su sabiduría y don de gentes, se preparo en el extranjero, trabajo en proyectos tendientes a mejorar la salud de los enfermos especialmente de cáncer con muy buenos resultados,se hizo una apasionada de la medicina alternativa, su fama creció en la frontera norte sobretodo en la ciudad de Tijuana que la hizo su segunda patria.
Como recordarán ella nació el día más importante de la historia de este país, nació en la calle de Regina en el año de 1948, cuando trascurría el desfile militar conmemorando el 16 de septiembre de 1810,día del inicio de la Revolución de Independencia.
Fue una mujer clara y precisa en sus apreciaciones, empeñosa, tozuda,se echo acuestas el sostén de sus hermanos cuando falleció el abuelo materno de ustedes.
Gracias a sus esfuerzos logro una posición destacada en los medios en que se movía, pero eso no fue impedimento para que siguiera siendo sencilla y servicial.
Tuve la oprtunidad de estar con ella junto con mi esposa Ninis, sus hermanos, Pepe, Pancho, Chela, A gustín,Hector Viki, los sobrinos Luis Fernando, Gaby, Daniela, los niños Daniel, José Antpnio y Erick y tu Roberto en su comida que conmemoraba sus primeros setenta años, fue un día feliz para todos los que estuvimos en ese apartado lugar de Baja California.
El pasado 22 de febrero a media mañana se marcho a la casa del padre, tranquila y en paz.
Hoy desde algún lugar nos observa y estoy seguro que desde ahí seguirá velando por nosotros.
Escribo estas sencillas lineas que nacen del corazón y le tributo este pequeño homenaje junto con mi esposa y mis cuatro hijos, mis tres nietos y mis dos nueras.
Bere, Roberto, siempre están en mis recuerdos y en mi corazón, aunque en estos momentos no este fisicamente con ustedes mis pensamiento y mi amor los acompañan, mantengan vivo su recuerdo por siempre.
Malu , amiga, cuñada entrañable te mando un abrazo y un beso a donde quiera que estés.
Tu enojón cuñado
MAURO.
PD. Pepe, Pancho, Chela, Ninis, estoy con ustedes sobretodo tu Ninis mi compañera mi amiga, mi sostén y mi esperanza.